Hackear cuenta de Instagram
¡Tus fotos podrían estar en peligro!
Utilizamos @nombresdeusuario y contraseñas para prácticamente todo en informática: cuentas bancarias, pagos con tarjeta y conexiones a cuentas de Instagram.
La capacidad de hackear una contraseña forma parte de las habilidades esenciales de los hackers. Algunas contraseñas de Instagram son fáciles de hackear y otras son muy complicadas. Por eso utilizan soluciones y técnicas únicas para lograrlo. Esto puede hacerse mediante fuerza bruta, DNS, botnets, phishing, suplantación... todos tienen su propio método y su especialidad. Algunos incluso comercian con herramientas para hackear contraseñas de Instagram en el mercado negro.
Instagram es una plataforma atacada regularmente por ciberdelincuentes. Se utilizan varias técnicas para hackear tu cuenta en línea. Aquí tienes algunos métodos muy poco comunes y peligrosos:
usando
PASS DECRYPTOR a partir de una dirección de correo electrónico
(también funciona con un número de teléfono o @nombredeusuario).
Expertos informáticos desarrollaron PASS DECRYPTOR, una herramienta de software capaz de generar datos de contraseñas para recuperar credenciales de cuentas.
Dado que el proceso es totalmente automático, solo necesitas esperar a que se complete. Aunque este sistema puede descifrar contraseñas de Instagram, también puede ayudarte a proteger tu perfil y fotos analizando e identificando contraseñas débiles o fáciles de adivinar.
Puedes descargar y comenzar a usar PASS DECRYPTOR inmediatamente desde su sitio web oficial: https://www.passwordrevelator.net/es/passdecryptor
El tráfico de Internet es el conjunto de acciones que realizamos cuando estamos conectados a la red. Esto incluye los sitios web visitados, las comunicaciones establecidas y todas las operaciones que llevamos a cabo desde la conexión hasta la desconexión. Para un usuario de redes sociales, por ejemplo, la mayor parte del tráfico será la comunicación entre él y los servidores del sitio que visita. Obviamente, aquí es donde surge el problema cuando un hacker entra en acción. Tiene la capacidad de interceptar el tráfico de diferentes maneras. Por intercepción de tráfico se entiende el hecho de que una persona, maliciosa o no, pueda tomar conocimiento de una comunicación entre dos terminales aunque esto no estuviera originalmente planeado ni autorizado.
En nuestro contexto, la intercepción de tráfico permite a los hackers obtener conocimiento de las credenciales de inicio de sesión necesarias para llevar a cabo su hackeo y acceder a tu cuenta.
Para llevar a cabo esta acción, existen varios métodos:
La contraseña es el identificador más importante para la seguridad de una cuenta en línea. Todos los ataques informáticos comienzan con la intención de encontrar o romper la contraseña. Aunque hoy en día se utilizan varios métodos para reducir su importancia, como la seguridad biométrica, de ninguna manera podemos reemplazarla adecuadamente. Por esta razón, los hackers buscan constantemente formas de acceder a cuentas en línea. Se desarrollan y utilizan continuamente varios métodos para eludir esta medida de seguridad:
Estamos hablando de una técnica considerada clásica en el mundo del cibercrimen. La relación social tejida entre los usuarios de servicios digitales se utiliza en su contra. En la ingeniería social, la persona con malas intenciones intenta aprovechar esta relación amistosa para recopilar información. En la mayoría de los casos, la información solicitada por esta persona parece inofensiva. Intentará averiguar tu fecha de nacimiento, preguntarte dónde estudiaste, el nombre de algunos familiares o incluso de tu mascota. Las preguntas suelen ser específicas, ya que investigaciones han demostrado que las credenciales de inicio de sesión generalmente se componen con este tipo de datos. La ingeniería social sí funciona, y varios ataques informáticos se han llevado a cabo debido a la vulnerabilidad de los usuarios en esta situación.
Se asemeja mucho a la ingeniería social en la forma en que se practica. Incluso podríamos llamarlo una forma de ingeniería social. El rastreo consiste en apuntar a una persona específica para determinar sus hábitos y preferencias. Esto puede usarse para apuntar a un grupo de personas o incluso a una empresa. No es necesaria ninguna comunicación. En su mayoría, el hacker observa a su víctima desde lejos e intenta averiguar cómo utiliza Internet e Instagram. Gracias a esto, intentará establecer el perfil de la víctima y luego adivinar sus credenciales de inicio de sesión.
Cuando hablamos de hackeo, también olvidamos el aspecto que no necesariamente consiste en tomar el control de tu cuenta en línea. Es posible que un hacker haga otra cosa: suplantar tu identidad y crear otra cuenta de Instagram fingiendo ser tú. Si lo logra, incluso puede incitar a tus conocidos y amigos a denunciar tu cuenta real. Perderás tu conexión en Instagram y él continuará suplantándote. Pero para que tenga éxito en su suplantación, primero recopilará información sobre ti, siguiendo obviamente tu perfil de Instagram para saber exactamente qué datos puede utilizar para ello.
Las bases de datos con credenciales de inicio de sesión de usuarios de redes sociales como Instagram no son muy difíciles de encontrar. Ya sea en la Dark Web o en servidores elasticSearch, los datos de conexión o personales de los usuarios de redes sociales suelen ser accesibles libremente, de forma gratuita o pagada. Probablemente te preguntes cómo es posible una situación así. Te lo explicaremos:
Una vez que los datos están disponibles, los hackers pueden realizar varios tipos de ataques informáticos. Podemos citar los más famosos, como el phishing, el ataque de fuerza bruta, el ataque de diccionario o, por supuesto, la suplantación de identidad.
Primero, debes minimizar la amenaza. Para ello, se recomienda:
R: No, acceder a la cuenta de Instagram de alguien sin su consentimiento es ilegal y poco ético. Viola las leyes de privacidad y puede tener consecuencias graves.
R: Puedes proteger tu cuenta de Instagram utilizando contraseñas fuertes y únicas, habilitando la autenticación de dos factores, evitando redes Wi-Fi públicas, manteniendo tus dispositivos actualizados y siendo cauteloso con los intentos de phishing.
R: Si sospechas que tu cuenta de Instagram ha sido hackeada, cambia inmediatamente tu contraseña, revoca el acceso a cualquier aplicación de terceros sospechosa y reporta el incidente al equipo de soporte de Instagram para obtener asistencia adicional.
R: Aunque los gestores de contraseñas pueden ser convenientes, almacenar contraseñas en los navegadores web puede conllevar riesgos de seguridad. Se recomienda utilizar gestores de contraseñas reputados con funciones robustas de cifrado para proteger tus credenciales de inicio de sesión.
R: La autenticación de dos factores añade una capa adicional de seguridad a tus cuentas al requerir dos formas de verificación antes de conceder acceso. Normalmente implica algo que conoces (como una contraseña) y algo que tienes (como un smartphone para recibir códigos de autenticación), reduciendo así el riesgo de accesos no autorizados.